Por asares del destino, un día hace 15 años llegue a Culiacán. En esos tiempos de acoplamiento con la ciudad, la gente, el clima, etc. Encontré refugio en las maquinistas. A esas maquinistas le llamaban "el pasillo", iba a la preparatoria en la tarde pero yo a mas tardar salia a las 9 de la mañana de la casa para escapar de todo.
No se cuando te salude o como es que platicamos por primera vez, de hecho no se ni cuando nos unimos tanto como amigos. Pero sin duda nuestra amistad a sido algo curioso.
Recuerdos varios y vagos invaden estas letras:
- Como cuando agarramos la maña de irnos a tomar a al bar las ventanas, con la XX Lager al 2 X 1.
- Te acuerdas cuando fuimos al cumpleaños del cejon, que yo termine de galán con una morra y tu platicando con los cholos de navajas, puñetes, pistolas jajaja y al final no dejo el papá del cejón en la entrada de Solidaridad y para bajarnos la peda nos pusimos a brincar en las gradas de la cancha de futbol.
- A veces iba a tu casa (en aquellos tiempos tu esposa no me quería) y sacábamos a pasear a la Ale al parque de la Canaco, ella tenia como dos años mas o menos, un día pateé un bote y ella se rió mucho y tu le decías a la Ale "tu tío pollo esta loco ¿Verdad hija?" y ella se reía y se reía.
- Cuando trabajamos en el expendió de cerveza y nos dimos una desveladota, que te corrieron de la casa por vago y mientras yo estaba disque atendiendo mientras, tú estabas todo malilla dormido arriba de los cartones de caguama, como olvidar que tu papá te chiflo y te hizo la señal de estas muerto pasando el dedo por su cuello, jajaja pero al final no la perdonaron porque Cris nos llevo birria para la soledad.
-O cuando te prometí que estaría en el cumpleaños de la Ale, en la plaza de la Ley, que llegue barrido directo del DF, que por cierto nos quedamos como con 100 fichas para jugar toda la semana en las maquinitas en el Planetario.
En fin podría estar aquí varias horas recordando mas cosas de cuando eramos jóvenes y vigorosos, pero te quitaría mucho tiempo. Después el destino nos separo, no supe ni cuando, ni como, pero hubo una distancia enorme de años si no me equivoco. Después paso lo inevitable y tuve mi accidente, y tu regresaste y estuviste ahí primero incrédulo de mi situación y luego jalandome para que saliera del hoyo, siempre me llevabas al hospital junto con la Cris Mordiscos y un domingo recorriste Culiacán por una puta ensalada de frutas. No se si merezca tu amistad o no, o si he sido reciproco a lo largo de tanto tiempo, no se si mas adelante nos volvamos a distanciar, en fin no se muchas cosas. Pero lo que si se es que te quiero y que te estoy agradecido por permitirme ser tu amigo y te deseo lo mejor lo sabes pero sobretodo que sigas siendo buen pare, esposo y amigo... Felicidades